De vez en cuando la vida te da sorpresas y aparecen en libros que se pensaban perdidos alguna joyita que viene a darle vidilla al mundo literario. Hoy nos hemos despertado con la noticia de que han hallado unas traducciones de novelas francesas realizadas ni más ni menos que por Gustavo Adolfo Bécquer, poeta clave en el romanticismo español.
Parece ser que durante una época de su vida, él también desempeñó nuestro oficio con bastante acierto, dándole a sus textos ese toque tan reconocible que le caracterizaba. El profesor malagueño Agustín Porras ha sido quien ha sacado a la luz las traducciones de Bécquer que firmó con seudónimo en una época en la que como no tenían dinero, se dedicaba a transcribir textos franceses que después ilustraría su hermano, un conocido pintor.
Me gusta mucho esta noticia aparecida en Granada Hoy, no solo por lo que significa para la literatura sino también porque dignifica el oficio de traductor.